martes, 22 de diciembre de 2015

Felices Fiestas en pocas palabras

El cielo se ve gris, plomizo, amenazante de lluvia a pocas jornadas de la Navidad y el Nuevo Año, como si el sol tuviera que pedir permiso para asomar en estas fiestas.
Más allá de las próximas medidas económicas que marcarán el comienzo de una año esforzado vienen a mi mente otras realidades, algunas esperanzadoras, otras tristes donde hay pobreza, marginación, guerras y un clima que no coincide con lo festivo.
Es la época de soñar, de creer que lo imposible será  realizable, que los dolores se han de ir y que la alegría permanecerá para siempre, aunque ello, en el fondo sepamos que no sea cierto.
Tenía ganas de escribir más y mejor para esta fecha pero veo que hay algo en mi mente que ya no funciona igual, intento crear pero es infructuoso.
¿La esperanza se pierde o no? ¿O será solamente un slogan que nos empuja a seguir adelante con optimismo? No lo se, pero ojala el 2016 cumpla muchos de los anhelos y plegarias de cada uno de nosotros.
Estoy seguro que en medio de un panorama oscuro el sol ha de infiltrar sus rayos para iluminarnos cuando menos lo sospechemos y poder así pasar una Navidad con quienes más queremos y un Año Nuevo con renovadas esperanzas.
Gracias a todos con quienes pasé este año por haber compartido momentos y haberme enseñado cosas de la vida. Que la Felicidad toque sus puertas y se meta para irse jamás, es mi deseo de corazón.

Alejo de Dovitis